RINCÓN del TIBET

Perdona lo más pronto posible… Agradece lentamente…

Perdona lo más pronto posible… Agradece lentamente…

Entre los pilares fundamentales de nuestro bienestar podemos resaltar el perdón y el agradecimiento, en ellos encerramos nuestra reacción a prácticamente todo lo que recibimos en la vida y definitivamente saber aplicarlos es una gran ventaja para nuestro recorrido por estos lares.

El perdón es sencillamente la decisión de que algo que nos hirió, ofendió o agravió en algún sentido, no lo siga haciendo, es quitarle el poder a eso que una vez nos lastimó… No perdonar nos mantiene anclados a una situación dolorosa, en donde nuestra mente toma un papel importante y nos puede someter a sufrir de forma prolongada por algo que ya no puede ser cambiado… El perdón es un don, un don que debemos utilizar tan rápido como podamos, tan pronto como nos demos cuenta de que algo nos ha afectado.

Tomemos la experiencia, aprendamos lo que se nos colocó en frente para nuestro crecimiento, analicemos por un momento y de la manera más objetiva posible lo ocurrido, evitando en lo posible cargar la situación de drama y tratemos de entender desde todos los aspectos posibles lo que nos causó algún daño… Cuando usamos la empatía, algunas veces resulta más sencillo perdonar, cuando nos ensimismamos, nos victimizamos, nos culpamos, se nos hace mucho más difícil.

El perdón es una herramienta mágica, pero lastimosamente no es tan sencilla de aplicar… el subconsciente trabaja de una manera diferente a nuestra mente consciente y los dolores acumulados cuando no se sanan, no nos permiten perdonar… Perdonar más allá de las palabras, sino desde nuestra propia esencia, más allá de la mente. Sin embargo el solo hecho de estar dispuesto a perdonar, es el inicio de una mágica actuación energética.

El perdonar es liberación; el perdón es pertenencia de cada ser y hay que liberarlo, no con la mente sino con la expansión de la conciencia, con el sentimiento del espíritu, si realmente deseas perdonar.

― Norys Uribe Santana

 

Por otra parte está el poder de la gratitud, el agradecimiento es la llave a puertas maravillosas que se abren en nuestras narices, es la forma más sencilla y práctica de activar la energía positiva en nuestras vidas… Siempre tenemos muchos motivos para agradecer, de hecho hasta las cosas que consideramos negativas en nuestras vidas son motivos de agradecimiento, ya que cada una de nuestras vivencias son las que nos llevan cada día a posicionarnos un lugar diferente, y durante este proceso si estamos atentos, si estamos conscientes, lo más probable es que crezcamos.

La gratitud no sólo es la más grande de las virtudes, sino que engendra todas las demás. ― Cicerón

 

Cambiar nuestros cristales para apreciar la vida, evaluar a quienes nos rodean desde la simplicidad del ser, tener la intención plena de perdonar y agradecer cada cosa que nos ocurra, sencillamente aligera nuestro equipaje, nos hace atravesar la vida sin tanto sufrimiento… Todo se simplifica, nos centramos en lo positivo, alejamos de nuestra mente los recuerdos del pasado que nos afectan y estamos a la expectativa de más y más cosas maravillosas por las cuales podamos agradecer.

Por esto y más te recomendamos perdonar lo más pronto posible y agradecer lentamente, comienza por allí y disfruta de la maravilla y magnificencia de tu vida.

 

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