Conviértete en el arquitecto de la vida que quieres
Esto debería estar más que tácito, ser los creadores de nuestra vida, es la única alternativa posible, es lo único que hacemos, sin embargo muchas veces no concientizamos esa creación y peor aún nos sentimos inconformes con la vida que llevamos.
La realidad es que absolutamente todo lo que ocurre en nuestras vidas es producto de nuestros pensamientos, de nuestras creencias, de nuestras acciones y nuestras decisiones. Entonces resulta bastante acertado pensar que tenemos un gran instrumento en nuestro poder para construir lo que realmente deseamos en nuestras vidas.
Cómo tener la vida que queremos:
Pensar de forma positiva
Convierte en un hábito pensar de forma positiva, no le des fuerza a los pensamientos negativos que lo que hacen es perjudicar nuestro estado de ánimo, mermando nuestras fuerzas, haciéndonos sentir miedo, tristeza y pueden hacernos dudar de nuestras capacidades, de nuestra fuerza interior, de nuestro poder para estar bien y sentirnos bien.
Ser agradecido
No hay manera de que siendo agradecidos, sinceramente agradecidos, la vida no nos sonría de forma continua y no nos dé continuamente más motivos para agradecer, si valoramos y apreciamos lo que somos, lo que tenemos, la grandeza y magnificencia de la vida, nuestra visión de las cosas es mucho más sana, nos alineará de forma más sencilla a lo que queremos.
Revisar pautas mentales
A lo largo de nuestra vida vamos acumulando en nuestra mente consciente e inconsciente una cantidad considerable de pautas y creencias, memorias que pueden estar dando como consecuencia una vida que no nos agrada tanto. Al revisar nuestras creencias y de ser necesario cuestionarlas o cambiarlas, podremos liberarnos de una cadena que nos mantiene atados a la vida que de acuerdo a nuestras pautas nos merecemos.
No mal invertir nuestro tiempo
En este modo de existencia tenemos como recurso finito el tiempo, aunque no debemos vivir estresados por el transcurrir del mismo, sí debemos hacer buen uso de él… Cómo optimizamos la inversión de nuestro tiempo? Haciendo un balance de los beneficios que tiene una inversión determinada de tiempo, qué estoy aprendiendo, lo que hago me acerca a donde quiero estar, me siento feliz, me retribuye en beneficios materiales, preferiría hacer esto antes de cualquier otra cosa? Evalúa las respuestas y evalúa si la inversión de tu tiempo está orientada a lo que quieres hacer con tu vida.
Hacer las cosas que nos gustan
Esto se vincula al punto de cómo invertimos nuestro tiempo, sin embargo, a pesar de tener una cantidad de actividades que no nos resulten tan agradables que no podamos por los momentos eliminar, siempre debemos guardar espacios para hacer las cosas que disfrutamos, las cosas que nos hacen sonreír, mientras estas cosas ocupen más parte de nuestro tiempo, mejor nos sentiremos.
Alejarse de las quejas
Vivir en un estado de inconformidad nos desgasta el ánimo, nos hace sentirnos incómodos y por lo general las personas que tienden a quejarse constantemente son poco proactivas, no seas una de ellas, si te fastidia llegar a casa y ver tus cosas en desorden, no te lamentes, haz el tiempo para arreglarlas, si en el trabajo no te entregan resultados a tiempo, convoca a los involucrados para evaluar el porqué del constante retraso y busca soluciones. Quejarse es una de las contrapartes del agradecimiento, no te quedes en la queja, camina hacia lo que te hace feliz.
Medita
Esto puede parecer medio yogui, pero la meditación es para todos, es el centro del balance interior con nuestro cuerpo, la meditación te ayuda a amaestrar tu mente, que es tan participativa al momento de crear tu vida, luego si hacemos de ella nuestra amiga, si la ponemos a trabajar como quisiéramos, estaremos cada vez mejor orientados y una de las formas de lograrlo es darle a nuestra vida ese descanso de mente que tanto necesitamos.
Cambia lo necesario
No eres un árbol sembrado, siempre tendrás la posibilidad de moverte, si algo no te gusta, cámbialo, si sientes que ya es momento de cerrar un ciclo, hazlo, si crees que hay una mejor manera de hacer algo, pues experimenta. Cambia lo necesario, sal de tu zona de confort, deja los miedos en suspenso, mientras los buenos resultados los desvanecen.
Aléjate de las malas influencias
Estamos en constante contacto con todo tipo de personas y es muy cierto que interactuar con ellas nos da un experiencia enriquecedora, todos tiene algo que ofrecernos, que enseñarnos, que transmitirnos. Sin embargo, cuando una persona solo tiene para enseñarnos a través de una actitud crítica, de un maltrato, de una ofensa, de una humillación, es mucho más práctico aprender prontamente lo necesario y dar vuelta buscando mecanismos de crecimiento que no nos lastimen en el camino. No solo aprendemos de los golpes, eso es un mito, así que selecciona a quienes les dedicas tus energías.
Considera estas recomendaciones y crea la vida que quieras vivir.
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