Si enfrentas un miedo podrás superarlo, si huyes, saldrá tras de ti
Así funciona, cuando no hacemos frente a un miedo, le estamos dando el poder de dominarnos, de limitarnos, de condicionar nuestros pasos, por lo cual si queremos deshacernos de los miedos lo único que podemos hacer es enfrentarlos.
Un miedo por lo general no están asociados a situaciones reales, en este caso un miedo puede protegernos, porque es nuestro mecanismo de supervivencia ancestral que nos da la oportunidad de huir, luchar o paralizarnos… Pero un miedo puede estar presentes solo en nuestra mente ante algo que potencialmente podría ocurrir.
La vida es maravillosa si no se le tiene miedo. ― Charles Chaplin
Obviamente existen escalas de protagonismo de estos miedos en nuestras vidas, pueden afectarnos en mayor o menor grado, pero siempre van a ser un factor que pueda perturbar la toma de nuestras decisiones.
Cuando vivimos con miedo, nos perdemos de lo más importante de la vida, que es el momento presente, todas nuestras energías se centran en un futuro incierto y algunas veces catastrófico afectado por aquello a lo que tememos.
Son muy variados los miedos, pero todos ellos nacen de alguna creencia que formó raíces en nuestro interior… Es de utilidad encontrar esa creencia en nuestro ser y desmontarla con los mejores argumentos y armarnos de valentía para tomar decisiones a pesar de nuestros miedos. Esto nos puede costar un poco al principio, pero una vez que demos el primer paso, lo demás fluirá de la manera más sencilla.
Cada vez que dejamos que el miedo interfiera en nuestras decisiones y acciones, estamos perdiendo una batalla, mientras que cada vez que accionamos y le damos la cara a esos miedos, le vamos restando poder, vamos comprobando que nada negativo ocurre, que el peor escenario se ubicaba solo en una proyección de nuestra mente.
Hemos venido a este plano a vivir plenamente, sin miedos, sin temor a que nos dejen, sin temor a morir, sin temor a enfermarnos o a envejecer, sin temor a que podamos o no conseguir aquello que queremos, estas adquisiciones las tomamos en el camino, hemos venido a aprender, a superarnos, cuando adoptamos temores y los alojamos en nuestro ser nos atamos un grillete que limita nuestros movimientos, cuando intentamos huir de ellos, evitándolos generamos un efecto que magnificará el poder de alcanzarnos, como cuando espantamos una abeja y ella se va detrás para picarnos.
Sólo una cosa vuelve un sueño imposible: el miedo a fracasar. ― Paulo Coelho
No huir de nuestros miedos, no evitar las situaciones que nos producen incomodidad, inclusive procurando buscar exponernos a aquello que nos produce temor, es lo que condicionará nuestra mente a nuestro favor, haciéndole entender que todo está bien, que no hay por qué temer, que podemos enfrentar nuestros miedos y ganar nuestra libertad.