Espiritualidad

Serás afortunado cuando tengas algo que no puedas comprar

Definitivamente existen muchas cosas muy gratificantes que podemos vivir y adquirir a través del dinero: viajes, propiedades, estudios, bienes y muchos otros activos que pueden inclusive hacernos la vida más sencilla.

Sin embargo, las cosas más maravillosas no se obtienen a través del dinero, las mayores bendiciones de la vida nada tienen con la capacidad adquisitiva netamente asociada a la economía.

El dinero puede actuar como facilitador, puede brindarnos un puente que pudiese hacer más sencillo nuestro tránsito, inclusive en cuanto a las cosas que no tienen precio, pero llegar a desvirtuar la realidad de tal manera, puede llegarse a ver como el fin en lugar del medio y no lo contrario.

Las cosas que se pueden comprar con dinero es mejor comprarlas sin pensar demasiado si ganas o pierdes. Es mejor ahorrar las energías para aquellas cosas que no pueden comprarse con dinero. ― Haruki Murakami

Desde un amanecer con todos los colores que el alba matutina ofrece, pasando por una sonrisa, una caricia proveniente del ser amado, la satisfacción de la honestidad, la fe, el amor de un hijo hasta terminar en la vida misma, que aun con todo el dinero del mundo, absolutamente nadie es capaz de comprar un minuto más en este plano.

¿Cómo podéis comprar o vender el cielo, el calor de la tierra? Esta idea nos parece extraña. No somos dueños de la frescura del aire ni del centelleo del agua. ― Toro Sentado

No se trata de despreciar el dinero, no, sino darle su justo valor, saber que ante todo no somos lo que poseemos, ni estamos limitados a lo que indique nuestra cuenta bancaria, ante todo somos seres que nos encontramos en esta mágica experiencia llamada vida, y de forma circunstancial, nos encontramos en un punto histórico particular, asociado a una sociedad en la cual el dinero ha tomado un papel protagónico.

Dedícate a hacer lo que amas y el dinero nunca será una preocupación, tu estado de conexión contigo mismo hará que estés alineado con la energía de la prosperidad, incluyendo la económica, pero tu plenitud es la que hará que no necesites nada, no al contrario.

Fortalece todo aquello que no tiene precio, tus afectos, el respeto, tu honestidad, tus talentos, tu amor propio y haz buen uso del recurso fundamental que te permitirá hacer lo que quieras: el tiempo. Ése que no se recupera, que algunos lo comparan justamente con el dinero, como para darle importancia a través de un símil que lo deja corto. No lo dediques a personas que no lo valen y mucho menos a actividades que no te lleven a donde quieras estar.

Quizás puedas estar preocupado por alguna situación limitada económicamente, pero si dejas de pensar en ello de forma negativa y sencillamente te enfocas en combatir la escasez con abundancia, verás que pronto las cosas comienzan a fluir de una forma favorable para tu vida en general y para tus finanzas en consecuencia.

Seguramente en tu vida tengas muchas cosas que el dinero no puede comprar, pues siéntete agradecido y en alineación con esa energía recibirás de la vida lo mejor que tiene para ti.

¿Y de qué te sirve poseer las estrellas? Me sirve para ser rico. ¿Y de qué te sirve ser rico? Me sirve para comprar más estrellas.

― Antoine de Saint-Exupéry

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