No me molestó que te fueras… sino lo que me dejaste
Tarde o temprano el amor trasciende, en algunos casos solo suele aligerarse, en otros se intensifica y en muchos casos se va para nunca más volver…
Algunas heridas no se curan, sólo se aprende a vivir con ellas. Anónimo
Todos al iniciar una relación, debemos tener presente que no siempre va a ser lo que esperamos o lo que deseamos, las relaciones suelen cambiar y tomar matices distintos, por lo que siempre debemos estar preparados para lo nuevo y lo inesperado.
Estuviste a mi lado y tomaste la decisión de partir, no puedo hacer nada en contra de ello, no puedo retenerte si no quieres, ni obligar a tus sentimientos a sentir y a ser lo que no son, comprendo lo que vivimos y lo atesoro, fueron muchos años compartidos y muchas experiencias vividas, no me molesta que te hayas ido, más no puedo perdonarte por lo que me dejaste…
La vida no te quita personas, te aleja las que ya no necesitas, las que no merecen estar en tu futuro. Anónimo
Me dejaste las ganas de seguir adelante, me dejaste los recuerdos vivos de cada mañana y de cada atardecer, me dejaste la enseñanza grabada en la piel, en la mente y en el alma y me dejaste muchos espacios vacíos en la vida.
Ahora debo comenzar de nuevo, empezar, levantarme y seguir adelante, ir llenando cada espacio que dejaste ir, borrando cada recuerdo para que pase al olvido, debo recoger cada pedazo de esta relación y tratar de arrumar lo que quedó en algún lugar, hasta que pueda recogerlo sin sentir dolor, necesito aprender a amar nuevamente sin ti.
¿Por qué volvéis a la memoria mía, tristes recuerdos del placer perdido…? Jose de Espronceda
Sólo me pregunto porque no te llevaste todo esto contigo? para mí hubiera sido más fácil y distinto si no tuviera que verte en cada lugar y en cada momento, no sé si haberme dejado todo esto hizo más ligero tu equipaje, quizá para ti todo sea más fácil, yo debo cargar con este peso hasta que sane y no me queda más que aceptarlo y tratar de trascenderlo, para poder levantarme nuevamente y mirar hacia adelante.
No me molesta que te hayas ido, sino todo lo que me dejaste, pero más me molesta conmigo mism@, no haber tenido el valor de enviarlo tras de ti o de sencillamente recogerlo todo y cerrar la puerta tras de mí, pero lo que más lamento y que quizás sea mi mayor impulso, es que es de esta molestia que sacaré verdaderas fuerzas para seguir adelante, me dará voluntad y valor para algún día mirar hacia atrás y tener el alivio de ya no cargar más con todo lo que me dejaste.
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