Cuando tienes claras tus convicciones en la vida, no necesitas defenderlas ante nadie
¿Creencias?…Muchas podemos encontrar en la vida, especialmente hoy día, que todos apuntan a nortes distintos, en la búsqueda personal de cada quien, en lo que presienten, en lo que sienten y en lo que consideran puede guiar su vida, o incluso convertirse en su vida misma.
Una fuerte convicción forma a los héroes como a los fanáticos. Anónimo
¿La verdad?…Pueden haber muchas, cada quien tiene la suya, su motivación, su razonamiento, aquella creencia que les satisface y que cala con sus principios en la vida, lo que conforma y de alguna manera nos orienta para hallar la tranquilidad en determinados momentos y espacios.
Además de identificarnos con ciertas costumbres, creencias o tradiciones, solemos desear que los demás, nuestros allegados y seres queridos, compartan la misma dicha, de manera que le extendemos nuestra práctica en aras de que tenga el mismo efecto en los demás y pueda ayudarles a encontrar la felicidad que nos dió a nosotros…
Siempre queda a cada uno suficiente fuerza para luchar por lo que está convencido. Goethe
Es importante recordar que cada quien tiene sus propias convicciones, principios, valores, y que aquellos que sustentan su vida en bases sólidas de convicción, no sólo no necesitan imponer nada, únicamente exponer, sino que además no siente la necesidad de defenderlas, no es menester alinear a nadie con nuestro pensamiento, el respeto a los tiempos, espacios y criterios es una gran virtud, que va más allá de cualquier convicción.
En un mundo tan convulsionado como es la tierra, donde la fe y la esperanza se encuentra en los extremos, donde la necesidad de trasmitir es vital, donde existe un llamado de conciencia al despertar de las personas, tener convicciones claras es imprescindible para no dejarse arrastrar por cualquier cosa.
La convicción es la conciencia del espíritu. Nicolás Sebastien
Quizás por eso veamos tanto desequilibrio hoy día, tanta confusión y tanto caos, pues cada quien quiere imponer sus convicciones y la tolerancia y el amor compasivo, parecer estar ausente en la mayoría de ellas.
Lo importante es que tú tengas claro hacia dónde te diriges, lo que buscas y por cuánto tiempo te dedicas a ello, no necesitas imponer, ni aclarar, las convicciones son lo que ya son, las transformaciones y las connotaciones se la damos los hombres…
Más allá de las convicciones, el amor siempre llevará la batuta, no se aprende, ni se enseña… Simplemente se siente…
Por: Marvi Martínez