Crees que das más de lo que recibes?
Cuando yo doy, me doy a mí mismo. Walt Whitman
La solidaridad entre los seres humanos, aunque escasa hoy día, sigue existiendo, las personas conservan en lo profundo de su ser, la bondad de ayudar a los demás, de escuchar, de solidarizarse y en los momentos menos pensados, recibimos ayuda de quién menos lo esperamos.
Ocurre que en muchos casos, nuestra mente nos juega espacios que nos hacen pensar que merecemos más de lo que tenemos y que de alguna manera estamos dando más de lo que recibimos, este solo pensamiento nos coloca en una situación defensiva, nos hace pensar que debemos limitar nuestra manera de ser en el sentido espléndido y que quizás debamos ser un poco más apáticos en cuanto al sentir de los demás.
Da y tendrás en abundancia. Lao-Tsê
No se trata de una competencia, la vida, la existencia humana, lleva impresa la marca del amor, aunque en muchos casos la maldad siga imperando, no es el común, no deseamos, la mayoría de los seres del planeta tierra, vivir en miseria, en oscuridad, en las bajas pasiones de herir a los demás, hoy por hoy, la mayoría de la humanidad ha entrado en luz, comprende la necesidad de ver al semejante y de entender sus necesidades, sin embargo, la lucha no termina allí.
Para realmente lograr conquistar grandes espacios en la humildad y en la bondad del ser humano, debemos empezar por nosotros mismos, si cada uno de nosotros tuviera un segundo, un instante para verse a sí mismo, para evaluar la capacidad de aporte que puede dar a este progreso, sería imparable el cambio, y aunque ya lo es de igual manera, depende de cada uno de nosotros y su grano de arena, que ese cambio sea lo más pronto o lo más lejano posible.
El secreto placer de un acto generoso es el mayor placer de un espíritu elevado. John Dryden
Pensar que se da más de lo que se recibe, genera psicológicamente una necesidad de parar, de ser menos bondadosa, menos colaborador, menos dispuesto, pensamos que allá cada quién con sus asuntos, total nadie se preocupa de los míos…y tristemente si todos los seres del universo nos sumáramos a ese pensamiento, en lugar de unirnos al pensamiento de amor universal, entonces viviremos unos cuantos siglos más inmersos en el egoísmo puro.
De seguro muchas personas, que se atreven a reflexionar sobre este aspecto, coincidirán en estar realmente agotadas de estar dominadas y dirigidas por el ego, es llegado el momento de dar paso a la razón, ya no podemos continuar viviendo sumidos en esta mecánica en la cual somos indolentes e incapaces de involucrarnos con el otro desde el amor, desde lo más puro, desde el ser, sin mayor interés personal o sin buscar beneficio alguno más que el consuelo que podamos brindar y recibir.
Quien consuela un corazón triste, en realidad recibe mucho más de lo que da, así que nunca pienses que das demasiado, actúa con tu deseo más puro de humanidad y de solidaridad y no te arrepientas de ser quien eres, no es siendo egoísta, avaro, desprendido e indolente como se llega a los mejores escenarios de humanidad, la dicha y la plenitud va de la mano…con millones de personas.
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