Siempre llega alguien que te hace olvidar el ayer y te hace soñar un mañana
Muchas veces pensamos que nuestros pensamientos y sentimientos siempre volarán a nuestro pasado, tratando de buscar de alguna manera de poder hacer las cosas diferentes, de crearnos escenarios hipotéticos con finales felices o al menos diferentes. Aún a sabiendas de que es inútil permanecer anclados a algo que no podemos cambiar.
Nos cuesta mucho pensar que podremos vivir sin los recuerdos que ocupan nuestra mente y por lo que nuestro corazón de tanto en tanto se comprime como queriendo sacar fuera todo el dolor que le produce volver al ayer. Algunas veces nos falta voluntad para salir de una situación determinada, para cerrar un capítulo y si es necesario cerrar ese libro… Pero cuando menos lo esperamos, alguien llega a rescatarnos del profundo vacío emocional que se ha generado en nuestro interior para plantearnos nuevas oportunidades en cuanto al amor se refiere.
Siempre hay que saber cuándo una etapa llega a su fin. Cerrando ciclos, cerrando puertas, terminando capítulos; no importa el nombre que le demos, lo que importa es dejar en el pasado los momentos de la vida que ya se han acabado. ― Paulo Coelho
Resulta complicado cuando una persona ha pasado por una separación comenzar una nueva relación. En principio puede haber mucho dolor contenido que nos nubla la mente y no nos permite ver todo lo positivo que esa nueva persona pueda traer a nuestras vidas. Caemos en errores como la comparación, la necesidad de llenar espacios, ejecutar patrones preestablecidos con la persona que ya no está en nuestra vida, desconfiar por experiencias pasadas y el peor de todos cerrarnos a la posibilidad de enamorarnos por no salir lastimados.
Afortunadamente cuando no estamos buscando el amor, cuando nos liberamos de las necesidades y de los miedos, éste llega… Y lo hace para invadirnos, para colmar nuestros espacios, para hacernos saber que no es necesario volver al pasado para sentir las espinas de un amor frustrado, sino por el contrario, que vale la pena vivir el presente, que vale la pena abrirse paso a un nuevo amor, con el que paulatinamente iremos escribiendo un nuevo libro y que nos dará la posibilidad de distraernos del presente solo con proyecciones futuras que esbocen una sonrisa en nuestro rostro y en nuestro corazón.
No te cierres las posibilidades de vivir el amor que quieres en tu vida, es cierto que existen personas que nos marcan, que por un motivo u otro no pudimos mantener en nuestras vidas. Pero nunca desconfiemos de que merecemos lo mejor y que probablemente por eso no funcionó alguna de nuestras experiencias pasadas… Piensa siempre que lo mejor está por venir y está preparado para recibir en tu vida a esa persona que con mucho o poco esfuerzo hará que tus recuerdos no te visiten con frecuencia y te tomará de su mano para soñar un futuro juntos.
Por: Sara Espejo – Rincón del Tibet