Borrar los errores del pasado, también borrar la sabiduría
Borrar los errores del pasado es borrar la sabiduría del presente
Todos en el recorrido de nuestros caminos, de alguna u otra forma cometemos errores, caemos y nos levantamos, fallamos y decepcionamos a alguien, parece ser que esto es parte de la vida, pero no cualquier parte, en realidad los errores son nuestros mejores maestros y solemos aprender de ellos, a través de las vivencias y de las experiencias que quedan tras los errores, nuestra visión cambia, nuestra actitud se transforma y somos capaces de tener distintos enfoques ante la vida.
Cometer errores puede parecer algo malo, de hecho pasamos gran parte de nuestra vida tratando de borrarlos y evitarlos, pero no es cuestión de contabilizar nuestros errores o de pasar la vida ajenos a ellos, evitándolos, ignorándolos o peor aún, procurando borrar estos errores, pues no nos damos cuenta que de ellos depende la sabiduría presente.
Me gustan mis errores, no quiero renunciar a la libertad deliciosa de equivocarme. Charles Chaplin
Cada experiencia en nuestra vida, buena o mala, constituye un aprendizaje, cada persona que llega a nuestra vida, bien sea por dolor o amor, nos deja una enseñanza y muchas veces no se van hasta que logramos entender lo que vinieron a mostrarnos, pero esto solemos comprenderlo mucho después de haber vivido la experiencia, por eso nunca debemos querer borrar nuestro pasado.
Los errores, también tienen su parte trascendental en la vida y dependiendo de cómo los afrontemos, podremos sacar gran provecho de ellos, más allá de los sin sabores que dejan los errores, del malestar en muchos casos y de la tristeza o desánimo que puedan causar, un error siempre es una oportunidad, de saber, de comprensión, de apertura a la sabiduría, pues si de algo podemos estar seguros, es que ese error volverá a nuestra memoria cuando nos encontremos a punto de cometer un acto similar.
Cada fracaso enseña al hombre algo que necesitaba aprender. Charles Dickens
Intentar borrar nuestros errores del pasado, solo representa ignorar la sabiduría presente, pues lo aceptemos o no, nos vamos convirtiendo en nuestras experiencias, a partir de ellas vamos forjando criterio, posiciones, visiones y actitudes ante la vida, si nos cerramos a nuestras equivocaciones y pretendemos olvidarlas, simplemente no tendremos la opción de utilizarlas cuando realmente las necesitemos, toda nuestra sabiduría presente tiene una sólida base en el pasado, de allí que aquellas personas que han tenido grandes vivencias, suelen estar repletas de sabios consejos.
Aprovechar cada vivencia en la vida, es una manera maravillosa de mantenernos unidos al presente, pues aunque el pasado atrás queda, siempre podremos rememorar esa experiencia cuando sea requerida, sin dolor, sin sufrimiento y sin arrepentimiento, solo tomando de ella eso que es necesario para tomar siempre la mejor elección y con la plena disposición de que nuestros caminos nunca son errados, solo son diferentes y con opciones inesperadas, no todo lo que nos ocurre es siempre maravilloso, muchas lágrimas suelen rodar por nuestras mejillas a lo largo de cada existencia, pero también es cierto que todo siempre se trata de amor y compasión, y esto depende solo de cada uno de nosotros.
Muchos de los fracasos de la vida son de personas que no se dieron cuenta de cuán cerca estaban del éxito cuando se dieron por vencidos. Thomas A. Edison
No borres tu errores del pasado, no ignores tu sabiduría, toma cada momento y conjúgalo en el presente eterno de tu vida, cada error cometido es un progreso y cada uno conlleva en sí mismos un instante de sabiduría plena.
Por: Marvi Martínez – Rincón del Tibet
