Atrévete a invitarte un café a ti mismo…
Tener el atrevimiento en la vida, es parte importante del recorrido de nuestro camino, tomar decisiones, correr riesgos, asumir roles y cumplir con los compromisos, va desarrollando cada una de nuestras metas, nos va abriendo el camino y orientando nuestros horizontes. A lo largo de este recorrido, solemos esperar y necesitar compañía, es parte de la esencia humana el tener que relacionarnos, complementarnos y estar junto a alguien más, sin embargo, no está demás atreverte a invitarte un café a ti mismo, sin esperar más compañía.
Conocerse a sí mismo, es un paso que pocas veces nos atrevemos a dar, obviamente es un proceso largo, que puede incluso llevarnos toda una vida, pero de seguro será la mejor manera de dar paso a la compasión, de aceptar a los demás, de amar sin prejuicios y sin apegos, algunos llegan a través del camino del sufrimiento, otros pasan años ocultos en la felicidad, pero tarde o temprano, aceptamos que nuestra principal compañía y destino, reside en cada uno de nosotros, en esos monólogos internos, en aquello que presentimos, que percibimos, en las emociones que se levantan en nuestro interior, que nos inquietan y que nos generan sentimientos.
Puedo enseñarle a cualquier persona cómo conseguir lo que quiere en la vida. El problema es que no puedo encontrar a quien pueda decirme qué es lo que quiere. Mark Twain
Estar a solas con nosotros mismos tomándonos un café , sin ocupar la mente, con la plena disposición de escucharnos, de entendernos, de aceptarnos, de indagar en nuestro interior aquellas cosas que nos ocultamos a nosotros mismos, aquello que nos desagrada y preferimos ni abordar y aquello que tanto nos enorgullece que pretendemos convertirnos en eso, cuando la esencia en una y única y en algún momento debemos reconocerla e integrarla.
Invítate un café a ti mismo, y ten la conversación más sincera de tu vida, la honestidad contigo mismo es tu mayor beneficio, la razón, la facultad de entenderte, de dejar de pretender y de quitarte las caretas, de otra manera, vivirás siempre oculto de ti, siempre serás lo que los demás necesitan y necesitarás constantemente vivir acompañado, pues será la mejor manera de alejarte de ti.
La manera en la cual nos relacionamos con nosotros mismos, condiciona el resto de nuestras relaciones, nos da más o menos seguridad, nos alimenta la autoestima, nos lleva a vivir cada instante pleno de disfrute en nuestra propia compañía, de satisfacción con nosotros mismos o a necesitar vivir a través de los demás, necesitar ese complemento que nos motive.
No existe mayor satisfacción que mirar hacia atrás y darse cuenta de que uno ha crecido en autocontrol, criterio, generosidad y acciones desinteresadas. Ella Wheeler Wilcox
Te puedes llegar a sorprender, de lo placentero que resulta tener esos espacios propios, así sea para un café, en los cuales eres solo tú, no necesitas impresionar, ni llenar ninguna expectativa, simplemente ser, dejarte fluir, sin apegos, sin juicios, sin necesidad de llegar a nada, a nadie, a ninguna parte, solo tú y tu presente.
Invitarte un café y pensar en ti no se trata de egoísmo, se trata de apertura, de conexión, de disposición y reconocimiento a lo que eres en realidad, a lo que escuchas en tu interior, a lo que aceptas y niegas de ti, y esto solo puedes percibirlo estando contigo, en verdadera entrega y consciencia de ello.
Aquel individuo que admite que sabe muy poco sobre sí mismo es el que tiene mejores chances de descubrir cosas sobre sí mismo antes de morir. S. I. Hayakawa
Muchas veces en la vida vivimos huyendo, y aunque digamos que huimos de personas y situaciones, no nos damos cuenta, que solo huimos de nosotros mismos, pues no se trata de vivir en soledad pura o de correr al otro extremos, se trata de saberte y conocerte en cualquier circunstancia, con compañía o sin ella, en estar cómodo contigo y ser capaz de disfrutar esos momentos y de necesitarlos.
Escúchate más a menudo, depura el pensamiento, aquieta la mente y da paso a que los verdaderos pensamientos del presente surjan y se manifiesten en tu vida.