Cada letra del libro de mi vida, solo la escribo yo …

Amo pensar que cada letra del libro de mi vida, solo la escribo yo

Qué sencillo sería creer que existe un plan universal en el cual todo está escrito letra por letra, donde tuviésemos la seguridad de que independientemente de lo que nos ocurra, estaremos bien, que vamos a poder levantarnos todas las veces que haga falta, que siempre tendremos las fuerzas necesarias para decirle a la vida no me rindo… aquí estoy y necesito mucho más que esto para salir del juego…

Lo bueno es que no tiene que estar escrito letra por letra… ni esto, ni lo contrario, sino que día a día construimos nuestro mundo, tomamos decisiones y cada vez adquirimos una experiencia que nos coloca en una posición de ventaja en comparación a cómo estuvimos en un momento previo de nuestras vidas.

No podría imaginar que no fuese totalmente responsable de lo que me ocurre, sino que solo estuviese interpretando un papel de un guion escrito por alguien más… Qué sentido tendría? No importaría mucho lo que hiciese, siempre obtendría un resultado preestablecido.

Somos arquitectos de nuestro propio destino. ― Albert Einstein

Puede que a muchas personas les guste librarse de responsabilidades y culpar a su suerte, al destino, a las circunstancias o a otras personas de lo que ocurre en sus vidas y no resulta de su agrado… Por lo general cuando algo les sale bien, tienden a apoderarse del crédito, me pregunto: cuando obtienen resultados positivos son creadores de su destino, pero cuando los resultados de sus decisiones no dan los frutos más deseados, el destino (inalcanzable) ¿les ha jugado una mala pasada?

Pues lo considero muy tedioso, me encanta pensar que lo bueno y lo malo de mi vida me lo he generado yo, algunas veces mi nivel de responsabilidad es tal, que me puedo encontrar cargada de culpa por cosas que a los ojos de los demás no pueden estar a mi alcance, pero considero que solo nosotros podemos crear nuestra vida… Inclusive la interacción que tienen los demás con nosotros es el resultado de nuestras acciones, nuestros pensamientos y creencias.

El hombre es dueño de su propio destino. Tú mismo, por el poder de tu pensamiento, creas tu destino. Pero puedes anularlo si quieres. Todas las facultades, energías y poderes están latentes en ti. Desarróllalas y hazte libre y grande. ― Swami Sivananda

Nuestro corazón a través de nuestra intuición, puede darnos algunas guías en relación a los caminos que nos conviene tomar, pero debemos estar atentos, sin estar predispuestos. Solo tener una buena conexión con nosotros mismos y la seguridad de que independientemente de la experiencia y su resultado, cada día nos dará una oportunidad de crecer, de aprender y de agradecer.

Asumir la vida desde la capacidad creadora y no como títeres de obra, nos da una sensación de libertad única, nos da la posibilidad de sentirnos dueños de nuestra vida y cada uno de sus pasos, la vida contiene riesgos, es una continua apuesta y en ella, algunas veces se gana y otras veces se pierde, pero es estupendo que podemos cambiar, retomar un camino, avanzar o sencillamente no hacer nada y vivir los resultados de esas decisiones.

Cada letra que esta en el libro de tu vidas, la escribes tu mismo, así que sea selectivos con tu historia…