7 formas de saber si has superado un viejo amor
A lo largo de nuestras vidas, estaremos expuestos a encuentros y a desencuentros en el amor, a pérdidas de personas que fueron importantes para nosotros y que hemos tenido por decisión u obligación que dejar ir.
Estas personas pueden seguir doliéndonos durante muchísimo tiempo, inclusive limitando las posibilidades de tener éxito en futuras oportunidades que nos brinde el amor. Algunos indicadores que nos dicen que hemos logrado sanar nuestro corazón y que hemos superado esa parte de nuestro pasado:
Recordamos sin dolor
Podemos traer a nuestra memoria fragmentos de la relación e inclusive la ruptura sin que esto genere en nosotros la presión en el pecho y el nudo en la garganta que caracterizaba este tipo de recuerdos.
No es la primera persona a la que queremos acudir cuando nos ocurre algo trascendental
Ante nuestros acontecimientos importantes positivos o negativos tenemos la tendencia de querer comunicarlo a nuestras afectos más importantes, cuando el instinto no es llamar, intentar contactar o de alguna forma hacer saber a ese viejo amor lo que nos ha acontecido. Cuando esto deja de ocurrir y nos es indiferente hacerle saber algo de nuestras vidas, nuestro corazón está sanando.
No comparamos a parejas posteriores con ese amor
Cuando llevamos aún algún amor en nuestro corazón solemos comparar a quienes le sigan, inclusive comparando nuestros sentimientos. Dejar de hacerlo es una buena señal.
No nos importa si tiene una nueva pareja
Frecuentemente cuando aún nos duele alguien no estamos preparados para escuchar sus buenas nuevas, para enterarnos que se encuentra feliz y mucho menos cuando ha establecido una relación con otra persona.
Nos alegran sus éxitos y nos entristecen sus malos momentos
A medida que sanamos nos resulta más sencillo aplaudir los éxitos que ese amor perdido obtenga sin estar ya con nosotros, así como no nos resultan gratas las adversidades que tenga que enfrentar. Entendemos a la persona como alguien que ocupó un lugar importante para nosotros y nos limitamos a desearle lo mejor.
No está frecuentemente presente en nuestros pensamientos
Nuestra mente está ocupada en otras cosas, los recuerdos o cualquier otro tipo de pensamiento asociado a ese amor rara vez rondan nuestro pensar.
No deseamos estar con ese amor cuando estamos con alguien más
Disfrutamos de nuestra compañía sin pensar que si estuviésemos con nuestro viejo amor la estaríamos pasando mejor o estaríamos sintiendo otras cosas. Inclusive cuando estamos enganchados emocionalmente a algún amor suele ocurrir que estemos en el sitio más soñado del mundo y solo porque esa persona no está a nuestro lado, no logramos apreciarlo.
Superar un amor no es sencillo, más cuando aún se amaba al momento de la ruptura, en todo caso, debemos poner de nuestra parte para recuperarnos pronto, para sanarnos, para abrirnos a otras posibilidades. Todas las experiencias nos dejan un aprendizaje y la vida siempre nos tiene preparadas cosas maravillosas, todo depende de nuestra actitud y de nuestras decisiones. El tiempo se encarga de aliviar muchas penas, de disimular las ausencias, pero nuestra actitud será clave para superar cualquier amor de nuestro pasado.
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