Espiritualidad

Obligados a ser felices

En el mundo en el que vivimos ser feliz ya no es solo una opción sino una obligación. Personas que caminamos con una sonrisa en el rostro cuando estamos destrozados por dentro. Las razones pueden ser varias, ¿por qué está mal mostrarnos tristes?

Desde pequeños nos inculcan que nuestro objetivo en la vida es buscar la felicidad. La felicidad es como llegar a la meta de nuestro yo, es nuestro mayor afán, nuestro objetivo. Pero… ¿es realmente esto posible?

La felicidad no deja de ser un conjunto de estados de ánimo que fluctúan con muchos otros, como la tristeza. La razón de que busquemos la felicidad, estar siempre bien, es que rechazamos los estados de ánimo que consideramos negativos, cuando son algo totalmente natural en nosotros.

Deja de buscar razones para ser infeliz. Enfócate en las cosas que sí tienes y en las muchas miles de razones por las que deberías ser muy feliz

La felicidad no es aquello que nos han contado

El patrón común de la felicidad cursa cuando has encontrado el equilibrio en todos los aspectos de tu vida. Por ejemplo, conseguir el trabajo de tus sueños con un sueldo decente, lograr encontrar al amor de tu vida, tener una vida relativamente perfecta.

Pero… ¿y si tener todo esto no nos hace realmente felices? ¿En verdad el trabajo lo es todo? ¿Y qué hay del amor? Las relaciones están cambiando, la vida está cambiando. En el tiempo en que vivimos estamos buscando nuevas formas de felicidad, por eso surgen nuevos tipos de relaciones y también nuevas formas de trabajar.

Debemos eliminar de nuestra mente que la felicidad es una meta, pues la felicidad ¡ya la tienes! ¿No nos crees? Tan solo mira a tu alrededor, ¿qué posees?

Tus amigos, tu familia, tus experiencias vividas, la persona que eres ahora mismo, todo el aprendizaje hasta el momento vivido… ¿De verdad eres tan infeliz como piensas?

En ocasiones nos creemos infelices porque no sabemos abrir los ojos ante lo que en verdad ya tenemos

El problema de sentirnos tan infelices a veces es que no valoramos lo que tenemos. Creemos que la felicidad hay que buscarla y nos obcecamos tanto en ello que no la percibimos cuando realmente ya la tenemos.

Decidimos no ser felices

Si reflexionamos un poco sobre nuestras vidas, en realidad estamos decidiendo no ser felices. Dejamos de disfrutar de las pequeñas cosas, vivimos por y para las redes sociales.

Las apariencias, mostrarles a los demás la vida que estamos viviendo es lo que nos mueve ahora mismo, pero ¿por qué esta necesidad de aparentar ser felices cuando realmente no sabemos ni qué es la felicidad?

Intentamos plasmarlo todo en fotos, manifestando experiencias que en realidad no disfrutamos, pues solamente queremos aparentar.

¿Cuál es tu felicidad? Para ti será una cosa, para mí será otra. Cada uno debe buscar lo propio, lo que lo hace feliz. Probablemente, cuando pienses en si en realidad eres feliz te des cuenta ¡de que así es!

El problema es que vemos nuestra felicidad empañada por los problemas, por las emociones negativas que obviamente todos tenemos en nuestra vida. Pero son emociones solamente, es algo normal, algo humano. ¿Sentirse triste ya significa ser infeliz?

No busques la felicidad en el futuro… solo debes saber distinguirla en el presente

Tú ya eres feliz y si no lo eres busca qué es lo que estás haciendo mal. Quizás no estés en el puesto de trabajo en el que quisieras estar, quizás tu relación de pareja no te esté llenando como debiera, quizás estés viviendo la vida como se espera que la vivas y no como quieres vivirla.

Piensa en todo esto, pero sobre todo piensa que la felicidad no se busca y tampoco es algo que esté en el futuro. Ya la tienes y si no es así es porque hay algo que falla en tu vida.

Cada uno de nosotros decide ser feliz, tú tienes el poder de decidir si quieres ser feliz o no, independientemente de las cosas que te ocurran en tu vida, que serán muchas, tanto malas como buenas. ¿Eliges ser feliz o eliges ser infeliz? Tú decides…