Tal vez, con el tiempo asumes que, si es que cometiste errores, eso no te convierte en mejor o en peor persona que el resto. Pero eso no quita que remontar de la crisis sea difícil.
¿Cómo puedes mantener o reforzar tu autoestima en esos casos? Ahí van tres propuestas:
1. Resalta lo positivo
A todos nos ocurren desgracias y experimentamos cambios que hubiéramos querido evitar. Pero, junto a “lo malo” siempre hay algo bueno de lo que podemos tomar fuerza.
Fíjate en lo que marcha bien. Quizás tienes una familia estupenda, un amigo leal, la facultad de apreciarlos y todas esas pequeñas cosas (o grandes) que te aportan felicidad. Muchas de ellas están ahí gracias a ti.
Si prestas atención a lo positivo y reconoces que tú eres una parte fundamental en buena parte de ese lote, ganarás fuerza para afrontar esa dura etapa.
2. Cuídate
Puede que estés estresado perdido con todo lo que está sucediendo y eso también influye en tu autoestima. Con tanta presión encima, es probable que te descuides, que dejes de invertir tiempo en ti.
Ese tiempo lo necesitas. Necesitas ratos para relajarte, para disfrutar de lo que te gusta hacer, para compartir experiencias con los tuyos, etc.
Todo eso te hace sentir mejor contigo mismo y te da más energía.
3. Recuerda que es temporal
No te atasques pensando que la adversidad va a prolongarse por el resto de tus días y que tú no puedes hacer nada al respecto. Todo pasa. Todo cambia.
Vas a ir saliendo de ahí, como has hecho en otras ocasiones. Confía en que cada paso que das es uno que te aproxima más a lo que quieres.
En la vida de todos hay pruebas difíciles que superar. Muchas veces se presentan sin que estemos preparados para afrontarlas.
En esos momentos es necesario que nos enfoquemos en lo positivo, en lo que nos hace más fuertes. De esa manera, también cuidamos de nuestra autoestima, ¿no te parece?