Cómo superar un mal momento
Todos tenemos malos momentos, pues no podemos estar siempre bien. No importe lo que cause ese mal momento que puede ser duradero o tan solo momentáneo. El reto está en poder superarlo de la manera más eficaz. Porque no será el único mal momento por el que pases. Porque se sucederán muchos más.
¿Has pasado por algún momento recientemente? Quizás estrés en el trabajo, la muerte de un familiar, diferencias con un amigo o incluso con tu jefe… Estamos rodeados de malos momentos, ¿cómo superarlos entonces para que no nos afecten en demasía? Hoy lo descubriremos…
Guarda los buenos recuerdos para los malos momentos y escucha… Apúntate a la vida, a decir lo que sientes, a sentir lo que vales, a soñar lo que quieres y a saber que te sobra con tener lo que tienes
-Rosana Rosana-
La felicidad no es algo constante
Durante toda nuestra vida estamos en la búsqueda activa de la felicidad. ¿Qué me la proporcionará? Quizás un trabajo estable, tener una pareja, formar una familia, quedarme embarazada, etcétera. Estas y otras más cosas son las que yo percibo que me pueden hacer feliz, pero ¿realmente es así?
Creemos que una vez conseguida cierta meta u objetivo lograremos la felicidad para siempre. Pero no tenemos en cuenta que la felicidad es algo muy poco constante. ¿No sucede lo mismo con la tristeza? No siempre estamos tristes. Nuestros sentimientos y emociones se van “turnando” por decirlo de alguna manera. Todo nos influye: nuestra vida, nuestro trabajo, las influencias externas…
Esto no es en absoluto negativo. Que la felicidad no sea algo que podamos tener tan fácil provoca que la apreciemos y la valoremos como debiéramos. Eso sí. Quizás estés equivocado y ya seas feliz. Mira a tu alrededor y empieza a apreciar las pequeñas cosas que tienes a tu alrededor. En ocasiones queremos buscar una felicidad que ya poseemos, pero de la que no nos damos cuenta.
La clave de la felicidad está en el equilibrio espiritual de quererse a sí mismo y amar a los demás
-Anónimo-
Siempre estás progresando
Progresar es algo necesario y bueno. ¿Crees que ya lo has aprendido todo? Nada más lejos de la realidad. A pesar de la edad que tengamos, por muy monótona que sea nuestra vida, siempre estaremos progresando. Porque cada día es diferente y porque seguiremos cometiendo errores de los que debemos aprender para poder madurar y conseguir ser la mejor versión de nosotros mismos.
No pienses que los errores y los fallos son algo negativo. No te cierres en banda frente a ellos, pues puedes aprender muchas cosas. De hecho, cuando comprendas que los fallos y los errores son algo muy positivo, dejarás de tener miedo a equivocarte, porque sabrás que sin error no hay aprendizaje y que a veces hay que darse cien mil veces contra una misma piedra para escoger el camino correcto.
Piensa un momento en tu “yo” del pasado. ¿Era igual que ahora? Seguramente, no. Pero de aquellas pensabas que habías aprendido muchas cosas, que quizás ya eras muy maduro. Curiosamente, ahora puede que te sientas igual, pero dentro de unos años pensarás: “qué tontería, antes no era nada comparado con ahora”.
La vida nos permite progresar, mirar hacia el pasado y ver que hemos recorrido un largo camino sin darnos cuenta. Nos permite observar cómo los errores, las vivencias, las experiencias nos han convertido en lo que somos hoy. Que si nos hubiesen ocurrido otras cosas diferentes seríamos completamente diferentes hoy.
¡Supera tus malos momentos!
Saber que siempre estamos en un continuo progreso y que la felicidad no es constante nos permitirá superar algunos malos momentos que podamos estar pasando. Pero, ¿esto es todo? No, pues aún existen muchos más pensamientos sobre los que debes reflexionar y tener en cuenta cada vez que un mal momento haga acto de presencia.
Reflexiona sobre ellos, interiolízalos y verás cómo probablemente ese mal momento ¡ni existe! Tú crees que sí, porque a veces tendemos a dramatizar demasiado la realidad. ¿Qué más puedo hacer para superar los malos momentos?
- Lo que sientes a veces no es real. Que a veces de sientas solo no implica que realmente lo estés, que sientas miedo en ocasiones no significa que tengas algo que temer. Mira más allá de tus miedos y tus dudas para poder encontrar la verdadera realidad. A veces hay que hacer que nuestro interior se calle para que no distorsione la verdad.
- No puedes cambiar aquello a lo que evitas enfrentarte, así que ¿por qué no plantarle cara? Muchas veces esquivamos o ignoramos situaciones nada agradables para nosotros, pero ¿solucionamos así el problema? En absoluto. Enfrentarte a esas situaciones te liberará de ese mal momento que te está agobiando tanto.
- Tu pasado no define tu futuro, así que aprende de él, pero no permitas que influya en tu presente. Este está nuevo, limpio, fresco, hoy puedes cambiar cosas, puedes ser ¡todo lo que quieras ser! Que tu pasado no te condicione-
- No conseguir lo que quieres a veces ¡es positivo! Aunque no lo parezca, no lograr lo que anhelas puede abrirte nuevas puertas y oportunidades, ampliar tu perspectiva sobre qué más puedes hacer, interesarte por un nuevo proyecto, plantearte una nueva meta.
No dejes que un mal momento te haga sentir como si tuvieras una mala vida
-Anónimo-
¿Sabrás ahora enfrentar mejor tus malos momentos? Piensa que muchas cosas que consideramos negativas en realidad nos benefician más de lo que creemos. No te dejes influenciar por lo que te han contado o enseñado, es el momento de reflexionar. Comete errores y cuando te encuentres con un muro imposible de saltar sopesa si puedes encontrar un agujero por el que colarte o es el momento de abrir otra puerta llena de posibilidades.