En la vida hay lugar para cada cosa y todo tiene su momento

En la vida hay un lugar para cada cosa y cada cosa tiene su momento

La armonía del universo pasa por muchas formas y maneras, aunque no lo percibimos, todo tiene un orden orquestal y es lo que permite el verdadero progreso y la real simplicidad de las cosas, así, por más que tratemos de invertir las cosas, adelantar o retrasar sucesos, cambiar, delegar o abandonar cualquier situación, definitivamente hay un lugar para cada cosa y cada cosa tiene su lugar.

Si hay luz en el alma, habrá belleza en la persona; si hay belleza en la persona, habrá armonía en el hogar; si hay armonía en el hogar, habrá orden en la nación; si hay orden en la nación, habrá paz …Proverbio Chino

A medida que pasan los años, nos vamos dando cuenta de nuestras verdaderas capacidades, las personas que pasan a formar parte de nuestras vidas, llegan y se van, otras permanecen y otras continúa, cada quien a su paso seguro y constante, dejan su enseñanza y de seguro se llevan algún aprendizaje de nuestra propia vida y así vamos labrando nuestro camino.

Nos fijamos metas, objetivos a cumplir y nos damos cuenta tarde o temprano, que por más que deseemos que las cosas ocurran en tal o cual momento, todo tiene un tiempo justo y perfecto, incluso muchas veces quienes deseamos a nuestro lado simplemente pasan de largo y quienes menos pensamos se convierten en fieles compañeros de vida.

Toda la armonía total de este mundo está formada de discordancias. Séneca

Allí está el verdadero placer de la vida, en el aprender, comprender y desconocer lo que nos llega con cada nuevo día, basta con intentar entender que cada cosa tiene su espacio debido, que cada espacio está destinado para alguien o algo en particular, y que por más que pensemos que las cosas cambiarán por ciertas acciones, que los capítulos pueden cerrarse sin haber concluido y que pretendamos quitar espacios ajenos, todo esto es inútil, pues siempre cada quien y cada cual reclama lo que por derecho le corresponde.

Los hijos exigen su tiempo, destinado a la fuerza, la pareja reclama su espacio, de amor y compañía, el trabajo hace su llamado constante, para recordar que solo el trabajo digno regenera, la familia siempre está presente, para aligerar o para hacer más pesada la carga, pero siempre está allí, ocupando su espacio en nuestra vida, los amigos vienen y van, suelen tener espacios bastantes amplios, incluso se hacen lugar en otros sitios para ser nuestro aliciente en la vida…el esparcimiento, el disfrute, el placer, hasta la música en su esencia, forma parte de nuestra vida y de nuestro universo en miniatura.

La armonía es un estado cuya expresión espiritual es el amor. James Allen

Darle a cada cosa su lugar y hacer un lugar para cada cosa, organiza tu vida, tu mente y tus pensamientos, manifiesta la amplitud de tu amor, la capacidad de expansión de tu alma con cada vivencia y la llegada de la sabiduría, con los años, con los daños, con cada emoción experimentada, pues la sabiduría y la sensatez también reclama su momento.

Todo en la vida tiene un ritmo, la esperanza, la economía de las cosas, la sabiduría de llevar la ley de amor impresa en cada una de nosotros, abre cada una de las puertas donde nos corresponde entrar, de allí la gran razón para no desesperar, para no llenarnos de ansiedad ante las cosas no suscitadas y los sucesos inesperados, todo tiene un por qué, una razón y un motivo especial y único para nuestra vida, simplemente debemos abrirnos a hacer ese espacio correspondiente a cada quien y cada cual, para no perdernos detalles y para poder disfrutarlo en pleno…