RINCÓN del TIBET

Ser dueño de si mismo es algo que no tiene precio…

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Ser dueño de si mismo es algo que no tiene precio…

Entre todas las cosas que enfrentamos en la vida, nos encontramos con el hecho de tener que ajustarnos al mundo, a la sociedad y a lo que nuestro entorno demanda, ésta es una elección obviamente.

Cada uno de nosotros tiene un día, más o menos triste, más o menos lejano, en que, por fin, debe aceptar que es un hombre.
Jean Anouilh

Sin embargo, no somos dueños, no podemos tomar el control de nuestra vida y decidirnos a ser dueños de nosotros mismos, a encarar nuestro destino, a elegir nuestro equipaje y a subir y bajar en aquellas estaciones de nuestra vida, que decidamos por voluntad propia, aunque no sea el deseo de muchos, poder hacer lo que queremos en nuestra vida, sin ser esclavos del deseo de nadie, es una elección de vida, que no tiene precio.

No estamos exentos, como muchos, de esperar que quienes amamos vivan conformes a nuestras elecciones, sin embargo, esto es una ilusión que tiene poco alcance, pues quien vive en consonancia con el deseo de los demás, deja de vivir su propia vida.

Tienes que saber como aceptar el rechazo y como rechazar la aceptación. Ray Bradbury

Entre esos avatares que nos toca enfrentar en la vida, muchas veces nos quedamos en medio de la nada, nos dejamos influenciar, convencer, incluso cedemos a nuestras propias convicciones y cambiamos nuestra opinión, no se trata de que esto sea o no bueno, no es cuestión de juzgarlo, evidentemente habrá momentos en los que será el mejor camino y habrá otros en los que quizá no sea la mejor elección, pero el punto está en la medida en la cual nos abandonamos a nosotros mismos, nuestro criterio, nuestros principios, por conveniencia o por comodidad.

Nada es más difícil que aceptarse uno mismo.
Max Frisch

Ante todos las jerarquías que la vida nos pueda poner, ante los apegos, ante cualquier circunstancia, nos debemos fidelidad a nosotros mismos, lealtad y valentía para vencer la ignorancia y correr el velo de los prejuicios en nuestra vida, para amarnos, conocernos y aceptarnos, las virtudes que nos harán dueños de nosotros mismos.

Aunque perdamos amistades, aunque no podamos complacer a todos en la vida, aunque sin desearlo debamos romper algunos corazones, nos debemos respeto, y la principal consideración debe partir y dirigirse hacia sí mismo.

Por: Marvi Martínez – Rincón del Tibet

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