RINCÓN del TIBET

El Secreto del Olvido

El Secreto del Olvido

 

Tú, mi amor, eres el viento que no supe prever y que ha soplado con más fuerza de lo que nunca hubiera imaginado. Tú eres mi destino. Nicholas Sparks

 

Después de tantos besos ¿cómo hago para borrar el sabor de sus labios? Ellos eran lo único que necesitaba para conseguir la calma, la serenidad necesaria para seguir avanzando, mi motivación para seguir luchando, no miento cuando digo que sus ojos eran hipnotizantes, una droga a la que sin duda era adicta, ¿ahora cómo hago si no está? ¿Si el calor de sus brazos no me calienta más? Me siento pérdida no sé qué hacer en mi rutina si él ya no pertenece a ella.

De verdad admiro a esas personas que llegan a superar a el amor de su vida, si tuviera a una de esas personas, valiente, sin duda muy valiente, ahorita frente de mí, le preguntara ¿Cuál es el truco? ¿Cuál es el secreto? Para sacarte del corazón a quien un día amaste tanto, a quien un día le diste todo de ti y no tu parte aburrida, ni tu parte malhumorada, le diste la mejor parte de ti, esa parte que solo se la das a las personas que de verdaderamente son especiales en tu vida y que creíste en algún momento se merecían la mejor versión de lo que eres. Pero ahora, ahora que estoy sin ti, esa parte, la mejor parte de mí se fue contigo, porque te ama y la complementas, y ahora me siento vacía, entonces sí yo conociera a esa clase de persona fuerte que ya superó a su alma gemela le daría una silla, un lápiz y un papel para que me escribiera paso a paso cómo hago para deshacerme del recuerdo de lo que un día fue tu amor.

A mí hasta ahora olvidarte me parece una tarea imposible, es que ¿Cómo olvidarse de alguien que todo te lo recuerda?, las películas, mi perfume, el cielo, la playa, mi casa, mi cama, hasta mi mascota, ese hermoso perrito que me regalaste en alguno de mis cumpleaños, ése al cual le pusimos el nombre que querías y ahora tengo que vivir muchos años con ese recuerdo. ¿Entonces?… ¿No parece tarea imposible? ¿Cómo hago? ¿Cómo hago para arrancarme esta pesadez en el pecho que me da cada vez que me acuesto de tu lado de la cama? Porque aunque han pasado tantos días, ahí… en el fondo, lo sé, yo lo siento, sigue estando la estela ya casi borrada de tu perfume, mi favorito.

 Si eres valiente para decir adiós la vida te recompensará con un nuevo hola. – Paulo Coehlo

 

N.G.

 

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