Relaciones

Quién es la persona indicada para reparar tu corazón roto?…

A todos en algún momento de nuestra vida nos rompen el corazón, nos involucramos en relaciones que no siempre son las más beneficiosas, o sencillamente el amor un día se desvanece y no podemos culpar a la otra persona, sencillamente ya no siente lo mismo y se marcha, entonces quedamos con la sensación de que se nos derrumbó todo, incluyendo nuestro futuro.

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Inevitablemente por más que intentemos vivir en el presente, cuando nos envolvemos en una relación amorosa, siempre vemos más allá y esa persona a la que amamos y tenemos a nuestro lado, forma parte importante de ese futuro, hacemos planes con ella, proyectos conjuntos, incluso nos vemos formando un hogar a su lado, cuando hay una ruptura amorosa todo esto desaparece y lo que queda, es nuestro corazón roto.

Ante este panorama básicamente tenemos tres alternativas, surge la gran pregunta de quién reparará ahora nuestro corazón roto? bien pudiera ser un amor nuevo, una persona que llega a nuestra vida y nos ayude a distraernos, quizá llegamos a enamorarnos, también pudiera ser esa persona que nos rompió el corazón y sencillamente, le damos una segunda oportunidad y por último, siempre nos dejamos a nosotros mismos, será que el extremo de mi propio brazo es mi mejor ayuda?

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Danielle Shorr

Evidentemente un amor nuevo siempre es de gran ayuda para reparar un corazón roto, bien sea para distraernos y si en el mejor de los casos terminamos enamorados, rápidamente podemos solventar esta situación, en cuyo caso pueden pasar dos cosas, cuando termina la relación con nuestro nuevo amor, nos surge nuevamente el sentimiento de ese amor que nos rompió el corazón o sencillamente, quedamos con un nuevo corazón roto…sea cual sea el caso, es sabido que nuevos aires siempre refrescan, y mantenernos distraídos con una persona que representa un escape posible, siempre resulta ser una buena alternativa para curarnos las heridas.

Otra alternativa es que quien nos rompió el corazón, sea la persona responsable de repararlo, es uno de los casos menos probables, la confianza se ha perdido y las circunstancias han cambiado, es muy difícil que la persona que nos rompió el corazón pueda resultarnos de utilidad en estos momentos, además no nos encontraremos con la misma persona y en la mayoría de los casos, las segundas oportunidades por lo general son buenas.

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Así nos quedamos sólo junto a nosotros mismos, nuestros más fieles y leales compañeros y de seguro, la mejor ayuda que tendremos para reparar nuestro corazón roto, aunque siempre seamos nuestra última opción, podemos sorprendernos con lo maravilloso que puede resultar darnos un espacio para sanar.