¿Por qué me odio a mí mismo?

Todos tenemos una voz crítica en nuestro interior que si le damos demasiado poder podemos provocar que no nos valoremos lo suficiente. Nuestra confianza y seguridad empezará a decaer y nos será mucho más difícil conseguir todo lo que nos propongamos.

¿Conoces la expresión de “ser tu peor enemigo“? Esas críticas tan duras que nos hace esa voz interna da lugar a una vorágine de pensamientos autodestructivos que no harán más que limitarnos. Pero, ¿por qué surge esta voz? ¿Por qué nos odiamos a nosotros mismos?

Silencia tus pensamientos negativos, estamos buscando la felicidad

Todos tenemos un “yo” interior que nos detesta

Son muchas las personas que se sienten diferentes con respecto a los demás. Pero, a veces nos encontramos con personas que alaban esa diferencia que te hace único y especial, mientras que otras te hacen sentir como un bicho raro.

El primer paso es aceptarnos tal y como somos observando nuestras diferencias como partes de nuestra personalidad que nos hacen personas únicas. Porque no todos podemos ser iguales. ¿Cuántas veces has intentado ser lo que los demás quieren que seas?

Cuanto tu “yo” interior te detesta es porque les has dado voz a todas las opiniones ajenas que señalan cómo debes ser, cómo debes comportarte, cómo debes aparentar. Es bueno que escuches las opiniones del resto, pero no que estas interfieran en tu personalidad. Cuando esto sucede, empiezas a vagar por el camino del odio hacia ti mismo.

El gran problema de este “yo” tan crítico que habita en nosotros es que nos impide gozar de una autoestima fuerte y saludable. Por si no fuera poco lidiar con las críticas ajenas, nosotros mismos tenemos un crítico que nos autoboicotea constantemente.

¿No te agota estar constantemente tomando en serio a esa voz que no tiene para ti más que desprecios y palabras negativas? ¿No quieres cambiar todo esto? Es el momento de ignorar a esta voz tan crítica y empezar a hacerle frente. ¿Contraatacamos?

Quiero dejar de odiarme a mí mismo

Dejar de odiarnos a nosotros mismos no será un camino fácil exento de dificultades. Aún así, es necesario poner todo nuestro empeño en conseguir un resultado exitoso para descubrir quién somos en realidad y empezar a desarrollar de nuevo esa seguridad que un día perdimos por el camino.

Para ello, hoy compartimos contigo algunos pequeños consejos que pueden ayudarte si has tomado la decisión de ignorar ese “yo” que continuamente intenta dañarte y minar tu autoestima. Es el momento de hacerle frente.

• El primer paso es identificar esa voz crítica. Para ello, debes indagar cuál es el origen de la misma, de dónde procede y qué la ha estado alimentando todo este tiempo. Quizás hayas tenido a unos padres muy exigentes o tal vez nunca te han señalado todos esos aspectos positivos que tienes.
• El segundo paso, una vez identificada esa voz crítica, es ser realistas con nuestras críticas. Si las analizas podrás comprobar que muchas son infundadas, un odio que no tiene razón de ser, que no tiene sentido alguno. De repente, te darás cuenta de que nada de eso tiene razón de ser.
• Ahora es el momento de desafiar a esa voz crítica, de plantarle cara y de contraatacar. Para ello, debemos empezar a cambiar ciertas conductas que nos empujan a esa autodestrucción.
• Por último, cambia el “me odio” por el “me gusto”. Siéntete cómodo contigo mismo, encuentra tu propia identidad, reconcíliate con tu forma de ser. No será fácil, pero cuando logres encontrarte y aceptarte te sentirás mucho mejor.

El pensamiento excesivo conduce a pensamientos negativos

Las conductas autodestructivas, mantener dentro de nosotros a esa voz crítica, no hará más que volvernos personas débiles, tristes, que no sepan lidiar con las circunstancias. Aprende a ser fuerte alejando todo ese odio infundado que tienes a ti mismo. ¡Te estás haciendo daño porque así lo quieres!