Lo que pasó, pasó… deja de torturarte y sigue con tu vida
Errar es de humanos, ante todas las situaciones que se nos ponen delante en la vida, podemos tomar decisiones equivocadas, cometer errores o simplemente no obtener lo que esperábamos, esto que pasó nos deja un aprendizaje, es parte de la vida, si no cometemos errores lejos estamos de comprender el verdadero sentido de las cosas, son las equivocaciones las que contribuyen a aclarar nuestras acciones futuras.
En las relaciones de pareja son muchas las oportunidades que se presentan para tomar decisiones, elegir, recorrer caminos y ser sensatos, debemos en muchos momentos pensar que hacer, solos o con nuestra pareja, sea cual sea nuestro plan, estamos constantemente expuestos a cometer errores.
Sin embargo, existen errores que suelen marcarnos, bien sea por el mal que nos ocasionó o que ocasionamos, sino ambos, el caso es que cuando la gravedad del asunto partió de nuestra equivocación, las cosas suelen pesarnos muchísimo más, ser más dolorosas y en momentos nos atormentamos con lo sucedido, aún y cuando fue conversado y se llegó a un acuerdo o peor aún, si se produjo una ruptura por consecuencia del error cometido, pero tenemos que entender que lo que pasó, era necesario para que aprendiéramos.
Atormentarse no enmendará el error de lo que pasó
Por más que pese el error cometido, que nos torture, que nos cueste realmente caro poder superarlo, no tiene sentido alguno atormentarse, sencillamente ya pasó y si tuviste la oportunidad maravillosa de reconocer tu error, para lo que hay que ser realmente valiente, entonces que sea esa voluntad de honestidad la que te sirva de baluarte, no las causas que te llevaron a cometer la equivocación y que además lo traigas a tu mente una y otra vez.
Algunas veces cometemos errores y accionamos de maneras terribles, incluso llegamos a desconocernos a nosotros mismos, nos arrepentimos y quisiéramos dar vuelta atrás, especialmente cuando lastimamos a quienes amamos, pero es bueno poner en la balanza lo positivo y lo negativo, y poder ver que por un error no tiene sentido destruir todo lo bueno de la relación.
Así que si pudiste enfrentar tu error y conversarlo y asumirlo, no te atormentes, saca el recuerdo de tu mente y mantente alerta a lo que vives, sin que sea el pasado tu motivación diaria.
Reconocer los errores de lo que pasó es de valientes
Siempre es más sencillo ver el error en la pareja, en la otra persona, en la contraparte, cuando se trata de nosotros mismos, por un tema de orgullo, ego o negación, siempre resulta más cuesta arriba, la soberbia incluso puede llevarnos a nublar nuestra vista y entendimiento y jamás reconocer el error cometido, hay personas que pasan su vida ciegos ante sus propias acciones y peor aún culpando a los demás.
Reconocer cuando te equivocas es de valientes, únicamente las personas con fortaleza, entereza y madurez, pueden responsablemente asumir su equivocación, sin excusas, sin argumentos inútiles e inoportunos y sin culpar al otro, a fin de cuentas cada quién es responsable de sus propios actos y no tiene mucho sentido decir que fuimos empujados a hacer tal o cual cosa.
Asume tus errores y lo que pasó, libérate de ellos y continúa construyendo tu futuro día a día.