Evita las heridas emocionales en tus hijos
Un padre no es el que da la vida, eso sería demasiado fácil, un padre es el que da el amor. Denise Lord
Todo tipo de relación es difícil, y la relación padre e hijo no queda exenta de estas dificultades. Como padres queremos lo mejor para nuestros hijos, por esta razón muchas veces sin querer cometemos errores ¿y quién no lo hace?, todos somos seres humanos imperfectos que durante la vida nos equivocaremos más de un par de veces. La clave está en no quedarnos en el pasado y enmendar lo que hemos cometido, cuando tenemos hijos además de ser una bendición conlleva muchas responsabilidades y no es de extrañarse que muchas veces las consecuencias de los errores que una vez cometimos caigan sobre ellos y los afecte de cierta manera, no hay que alarmarse como dijimos anteriormente la idea es solventar lo que ya se cometió.
La comunicación es algo indispensable en cualquier relación, ésta nos permite entendernos de una mejor manera y así evitar malos entendidos. Cuando tenemos un pequeño bajo nuestro cargo es un poco más difícil que él entienda las razones por la cual hemos tomado una u otra decisión, sin embargo, aunque sea pequeño y tal vez no capte la situación que lo rodea, es de suma importancia que le comuniques el porqué de lo que sucede y él a su paso comprenderá porque mamá o papá tomaron esa medida, a los más grandes si bien tendrán mayor retentiva son más propensos a las reacciones no agradables ante una noticia que no les parece o según ellos no les conviene, aquí es cuando hay que definir el límite entre hijos y padres y hacerles saber que a pesar de que tienen una edad promedio los que tienen la decisión final son los representantes del mismo.
Muchos de nosotros pensamos que con gritarles o reprenderlos ellos comprenderán que han hecho mal, sin embargo estudios han demostrado que los niños hacen más caso a sus padres cuando ellos se muestran como una figura de autoridad pero que los escucha, pone atención a sus quejas y preocupaciones, y que además los entiende.
La solución no está en gritarles sino en buscar la forma de no llegar al maltrato ni verbal ni físico, la educación no es castigo ni humillación, igualmente está penado por la ley y no solo eso está comprobado que los niños son propensos a sufrir traumas infantiles que en un futuro les traerá problemas de autoestima, de inseguridad y de conducta.
Ser padre se trata de dar vida y amor, se trata de guiar y aprender junto a tus hijos que es lo mejor para ellos, las relaciones padre e hijo usualmente se rompen por la falta de atención que presta el padre a su pequeño, como nos ponemos en la situación de otros adultos para ayudarlos cuando están en problema de la misma manera nos tenemos que poner en los zapatos de nuestros hijos por más pequeños que sean, no te olvides que aunque tenga menos edad que tú no significa que no pueda sentir la misma cantidad de dolor o desilusión, ten en cuenta que para cada quien su dolor o amor es único e inigualable porque todos somos diferentes, inclusive tu hijo.
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