9 Cosas que hacen las personas que contagian buena energía a los demás
Hay personas que siempre están contagiando buena energía a los demás. Son de los que sonríen mucho, que saludan a las personas con las que se van encontrando en la calle, que se fijan en los pequeños detalles y que se preocupan por los demás.
Estas personas en general también viven tranquilos y felices, y es porque han comprendido que la vida te da de acuerdo a lo que tu le des. Y que la propia actitud hacia el mundo define cómo el mundo te trata de vuelta.
Estos son nueve principios que siguen las personas que saben cómo tratar a los demás:
1. Quien tiene buena energía en vez de juzgar a las personas por su pasado, los apoyan y ayudan a construir su futuro.
Todos tenemos un pasado. Algunas cosas de nuestro pasado son fuente de orgullo, y otras son cosas que preferimos no recordar. Pero sea cual sea el pasado, todas las personas cambiamos y crecemos con las experiencias, entonces en vez de juzgar, es mejor ponerse de su lado y ayudarlos a lograr el futuro que quieren. El respeto y la aceptación son clave en este proceso.
2. Quien tiene buena energía escucha con curiosidad, habla con franqueza y actúan con integridad
La escucha y la curiosidad hace que las relaciones prosperen. Que tu hables con tu verdad permite a las demás personas que se sientan cómodas para poder decir la suya. Los demás se sienten cómodos con estas personas y sienten que pueden ser honestos. Además tu eres cuidadoso e íntegro en cuanto a las cosas que te cuentan. Las personas sienten que hay un interés en ellas, porque se ve la curiosidad por su vida y eso las llena de amor y buena onda.
3. Quien tiene buena energía trata a todos con amabilidad
Uno de los regalos más grandes que nos podemos dar las unos a los otros es la amabilidad. Cuando alguien está sufriendo, estar ahí para ellos. No se trata de hacerlo sólo por las personas que te caen bien y a las que respetas, eso es fácil, sino también hacerlo por completos desconocidos e incluso por personas con las que tienes menos afinidad. La verdadera amabilidad reside en el acto de dar sin la expectativa de recibir algo de vuelta.
4. Quien tiene buena energía no intenta verse más grande empequeñeciendo a los demás.
El momento en el que una persona siente que tiene el derecho de empequeñecer a los demás porque se sienten “superiores”, es el momento en el que esa persona demuestra lo pequeña que es ella misma. Las personas tienden a hacer sentir a los demás como se sienten ellos respecto a si mismos, ya sea grandes o chicos. Trata a todas las personas a las que conoces con honor.
5. Quien tiene buena energía recuerda que todo el mundo tiene una historia.
Todos tenemos nuestra historia. Pueden ser cosas del pasado o del presente las que estén condicionando el actuar de una persona, pero hay que recordar que las conductas no nacen desde la nada. Las personas que siempre esparcen la buena onda se reservan los juicios y en vez ofrecen su consideración.
6. Quien tiene buena energía no conocen a las personas por accidente.
Todas las personas a las que conozcas tendrán un rol en tu vida, ya sea grande o pequeño. Algunos te ayudarán a crecer, algunos te harán crecer, otros te harán sufrir, algunos te inspirarán a ser mejor. Al mismo tiempo tu estás jugando el mismo rol en sus vidas. Las personas que esparcen la buena onda tienen en cuenta que los caminos se cruzan por un motivo y tratan a las personas con importancia.
7. Quien tiene buena energía entiende que los mejores maestros no son los que te muestran el camino.
No hay alegría más grande que ayudar a las personas a tener una visión sobre ellas mismas, que se vean creciendo, llegando a lugares que nunca se hubiesen imaginado solos. Eso no significa que tengas que arreglarlos, en vez de eso, lo mejor que puedes hacer es mostrarles la su fuente de poder. Ofrecerles apoyo y motivación para que encuentren su propio camino, tu sólo les muestras de lo que son capaces. Lo único que hacen las personas que esparcen la buena onda es mostrarles que creen en ellos.
8. Quien tiene buena energía nunca mira a nadie para abajo, al menos que le estén estrechando la mano para levantarlos.
Tendemos a mirar la vida como meritocracia, por lo que algunas personas se confunden y miran para abajo a alguien que no ha logrado el mismo éxito o ha obtenido el mismo nivel educacional que los demás. Pero todas las personas tenemos nuestras luchas, nuestros logros y nuestros fracasos. Las personas que esparcen la buena onda nunca juzgan a una persona por lo que se ve, saben que todos tienen sus historias y que todos merecen ser tratados con dignidad.
9. Quien tiene buena energía aprecian a aquellos que les han apoyado, perdonan a aquellos que les han lastimado y ayudan a aquellos que lo necesitan.
Los negocios son complicados, la vida es complicada y el liderazgo es difícil. Trata a todo el mundo, incluyéndote, con amor y compasión y siempre estarás en lo cierto. Cuando tratas a las personas de la forma en la que te gustaría que te trataran tu vida mejora inmediatamente.