RINCÓN del TIBET

Hay quien se hizo más fuerte gracias a que no lo valoraron

más fuerte

Un aplauso para quien se hizo más fuerte gracias a alguien que no le dio valor

Las malas experiencias nos dejan dos opciones o nos derrumbamos o nos hacemos más fuertes, ciertamente nadie quiere a consciencia la primera opción, aunque ocurre en muchísimos casos. La segunda opción, la de hacernos más fuertes es la más anhelada por todos, sin embargo, no siempre tenemos claro cómo es que esa fortaleza llega a ser adquirida o si sencillamente siempre estuvo en nosotros y sencillamente salió a flote.

Algunas veces inclusive pasamos por las dos opciones de manera consecutiva, nos derrumbamos y nos levantamos fortalecidas… con suerte nos ahorramos el derrumbe.

Cuando hablamos específicamente de las relaciones amorosas, es frecuente la existencia de parejas en donde no existe un equilibrio, en donde inclusive la buena intención de una de las partes puede ser sometida a discusión, donde alguno evidentemente ama, cuida y respeta más al otro y donde alguno se está viendo emocionalmente afectado por hechos específicos o generales de la pareja.

Cuando uno ama es fácil engañarse, es fácil dar oportunidades, confiar y justificar las acciones en donde podemos sentir el desamor del otro, sin embargo, lo más difícil puede ser sincerarnos en cuanto a lo que estamos recibiendo, reconocer que no estamos siendo valorados y a partir de allí tomar una decisión por dolorosa que sea.

Obviamente hay tantas maneras de amar, como personas hay en el mundo, algunos podrán afirmar que nos aman de alguna extraña manera, pero si ese amor no nos satisface, no nos llena, no nos hace sentir especiales en la vida de esa persona, por muchos adjetivos que se le pueda colocar, muy probablemente no sea el amor ideal para nosotros.

Si no somos prioridad para alguien, lo más sano es aceptarlo, sufrir lo que tengamos que sufrir, pero darnos la oportunidad de construir nuestras vidas en función a lo que queremos y lo que nos merecemos.

Amémonos con tal intensidad, que podamos protegernos inclusive de nuestras malas decisiones, apostemos porque la vida está dispuesta a danos lo mejor, no nos conformemos con menos de lo que queremos. Solo en nuestra mente están esas limitaciones.

Y sí, en la vida se nos presentan situaciones en donde es necesario sacar de nuestro interior todos los recursos necesarios para mantenernos en pie, para volver a la batalla, para conquistar aquello que queremos. Saldremos lastimados más de una vez en nuestras hazañas, pero siempre podremos conocer de nosotros algo nuevo, algo que no sabíamos que poseíamos y cada vez estaremos más preparados, tendremos más y mejores recursos y sobre todo seremos más fuertes… Así que agradece cada prueba, cada persona, cada camino empinado, todo te está llevando a donde debes estar, y le ayuda a ser más fuerte.

 

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